Melilla busca una autonomía plena con la reforma de su Estatuto de Autonomía

Tras tres décadas desde su aprobación, el Estatuto de Autonomía de Melilla sigue sin cumplir las expectativas de autogobierno. La ciudad se enfrenta al reto de redefinir su modelo económico y recuperar competencias propias con una reforma de máximos

El Gobierno de Melilla ha reafirmado su compromiso con una reforma de máximos del Estatuto de Autonomía, con el objetivo de dotar a la ciudad de mayores competencias y fortalecer su autogobierno. Esta iniciativa coincide con el 30º aniversario del Estatuto, cuya evolución no ha cumplido las expectativas en términos de desarrollo económico y capacidad administrativa.

El Partido Popular (PP), que gobierna con mayoría absoluta, y Coalición por Melilla (CPM), principal partido de la oposición, han mostrado su respaldo conjunto a esta reforma durante el Pleno de Control al Gobierno. Ambas formaciones, que suman 19 de los 25 diputados en la Asamblea, buscan alcanzar un consenso con el resto de los grupos políticos, incluyendo al PSOE (tres escaños), Vox y Somos Melilla (un escaño cada uno) y el diputado no adscrito, Javier Da Costa.

En este sentido, la consejera de Presidencia, Administración Pública e Igualdad, Marta Fernández de Castro, ha invitado a todas las fuerzas políticas a sumarse a esta iniciativa y elevar una propuesta consensuada al Parlamento nacional. Según la consejera, “Melilla debe constituirse en la ciudad que se merece, con las competencias propias que permitan ejecutar su autonomía de manera efectiva”.

Una reforma de máximos para un nuevo modelo económico

La reforma estatutaria no se limita a una ampliación de competencias administrativas, sino que también busca sentar las bases para el desarrollo de un nuevo modelo económico. La ciudad ha enfrentado dificultades desde el cierre de la aduana comercial en 2018, lo que ha obligado al Gobierno a replantear su estrategia económica.

Fernández de Castro ha criticado que el Estatuto vigente ha sido limitado por interpretaciones judiciales que han restringido las capacidades de autogobierno de Melilla. En particular, la sentencia del Tribunal Supremo de 2019, que estableció que los gobiernos de Ceuta y Melilla deben estar integrados exclusivamente por diputados electos, ha sido señalada como un obstáculo para el desarrollo autonómico de la ciudad.

Objetivos de la reforma estatutaria

El Gobierno de Melilla defiende que la reforma del Estatuto de Autonomía es esencial para:

  • Recuperar y ampliar competencias propias, eliminando las limitaciones actuales impuestas por decisiones judiciales.
  • Impulsar un nuevo modelo económico, adaptado a las necesidades actuales de la ciudad y su tejido productivo.
  • Mejorar la calidad de vida de los melillenses, asegurando una mayor inversión y un desarrollo sostenible.
  • Garantizar una mayor capacidad de autogobierno, permitiendo que Melilla tome decisiones clave sin depender de interpretaciones externas.

La consejera ha subrayado que el artículo 5 del Estatuto establece objetivos fundamentales como la promoción de la libertad y la igualdad de los ciudadanos, así como el fomento del progreso económico y social de Melilla. Sin embargo, según el Gobierno local, estos objetivos no se han desarrollado como se preveía inicialmente.

Con la mayoría de PP y CPM a favor de la reforma, el siguiente paso es abrir un proceso de negociación con los demás grupos políticos para lograr un consenso amplio. Una vez consensuado el texto, será remitido al Parlamento nacional para su aprobación.

El Gobierno de Melilla insiste en que la ciudad necesita dotarse de una estructura autonómica que le permita gestionar sus propios recursos y definir su futuro sin limitaciones externas. Según la consejera Fernández de Castro, “ha llegado el momento de que Melilla ejerza su autonomía en plenitud y afronte los retos del futuro con las herramientas adecuadas”.

Con esta reforma, Melilla busca consolidarse como una ciudad con mayor capacidad de decisión y un modelo económico adaptado a las nuevas realidades, garantizando así su sostenibilidad y bienestar a largo plazo.