El fallecimiento de Abdel desata la indignación en Melilla y pone en jaque a la ministra de Sanidad
El fallecimiento de Abdel, el joven melillense con cáncer terminal que fue diagnosticado erróneamente, ha provocado una ola de críticas contra la gestión sanitaria en Melilla. La familia denuncia negligencia médica, mientras el Gobierno de la ciudad exige la dimisión de la ministra de Sanidad, Mónica García, por la falta de recursos y especialistas en la región.
El fallecimiento de Abdel, el joven melillense que padecía un cáncer terminal mal diagnosticado en un primer momento, ha generado una fuerte polémica en Melilla y ha provocado que el Gobierno de la ciudad autónoma exija la dimisión de la ministra de Sanidad, Mónica García. La familia del joven ha denunciado que Abdel recibió un diagnóstico erróneo que retrasó su tratamiento adecuado, lo que, según ellos, redujo drásticamente sus posibilidades de supervivencia.
El caso ha generado indignación entre los ciudadanos y políticos de Melilla, quienes han criticado la gestión sanitaria en la ciudad, que depende directamente del Ministerio de Sanidad. Isabel Moreno, senadora del Partido Popular por Melilla, ha acusado a la ministra de "dejar huérfanas" a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla en materia sanitaria, a pesar de que es una competencia exclusiva del Gobierno central, ya que las dos ciudades hermanas hacen frente a grandes carencias en materia de sanidad.
Moreno ha instado a García a adoptar medidas urgentes para solventar la grave situación de la sanidad en Melilla o, en su defecto, presentar su dimisión. "Es inaceptable que sigamos viendo casos como el de Abdel, donde la falta de recursos y de profesionales cualificados pone en peligro la vida de los ciudadanos", declaró la senadora.
Asimismo, esta problemática en materia sanitaria no es novedad. Si echamos la vista atrás, hace más de un año y medio se declaró Melilla y Ceuta como zonas de difícil cobertura para atraer profesionales sanitarios, pero hasta la fecha no se ha implementado ninguna medida concreta para solucionar la escasez de médicos y especialistas en los hospitales de ambas ciudades, en Melilla no hay oncólogo y en Ceuta existe uno para los 85.000 habitantes.
La familia de Abdel ha expresado su profundo dolor y ha pedido que se haga justicia para evitar que casos similares se repitan en el futuro. "No queremos que ninguna otra familia pase por lo que nosotros hemos vivido. Queremos respuestas y soluciones", manifestaron en declaraciones a los medios locales.
El caso de Abdel ha reavivado, una vez más, el debate sobre la calidad de la atención médica en las ciudades autónomas y la falta de inversión en recursos sanitarios. Mientras tanto, la presión sobre la ministra de Sanidad sigue aumentando, con cada vez más voces pidiendo explicaciones y medidas concretas para evitar que tragedias como la de Abdel vuelvan a ocurrir.