RABIA ANIMAL

Alerta tras la detección de un caso de rabia en un perro hallado junto a la frontera con Marruecos

Un perro infectado con rabia logró cruzar la frontera entre Marruecos y Melilla el pasado 3 de abril y fue capturado en el Dique Sur. Salud Pública ha activado la alerta sanitaria e insta a cualquier persona que haya tenido contacto con el animal a acudir urgentemente a los servicios médicos.

El perro infectado con rabia / EuropaPress
photo_camera El perro infectado con rabia / EuropaPress


La Consejería de Salud Pública ha lanzado una advertencia a la ciudadanía tras la confirmación de un caso de rabia en un perro que fue capturado el pasado 3 de abril en las inmediaciones del Dique Sur, una zona cercana al paso fronterizo de Beni-Enzar, punto de acceso desde Marruecos. El animal, que había logrado cruzar la frontera a la carrera, fue interceptado por el servicio de laceros municipales y falleció dos días después como consecuencia de la enfermedad.

Según han informado fuentes oficiales a Europa Press, se trata de un caso importado que ha encendido las alertas sanitarias tanto por el riesgo de transmisión de la rabia como por la posibilidad de que existan más animales contagiados en la zona. La rabia es una enfermedad vírica de carácter mortal que puede afectar tanto a animales como a seres humanos, y cuya transmisión se produce normalmente a través de mordeduras, arañazos o contacto con mucosas por parte de un animal infectado.

Llamamiento urgente a posibles contactos

Ante la gravedad de la situación, las autoridades sanitarias han hecho un llamamiento urgente a la población para que cualquier persona que haya tenido contacto con este perro —ya sea de forma directa o indirecta— se ponga en contacto de inmediato con los servicios sanitarios. La detección temprana y la aplicación del protocolo de profilaxis postexposición pueden ser vitales para evitar consecuencias fatales en caso de contagio.

Desde la Consejería se insiste en que este tipo de situaciones requieren la máxima colaboración ciudadana. “Pedimos que nadie pase por alto haber visto o tocado a este animal, aunque fuera brevemente. La rabia es una enfermedad extremadamente grave y no debemos correr riesgos innecesarios”, han señalado fuentes del área de Salud Pública.

Refuerzo del control fronterizo y medidas de prevención

El caso ha generado también preocupación en el ámbito del control fronterizo, especialmente por la facilidad con la que el animal cruzó desde el lado marroquí. Las autoridades melillenses no descartan reforzar la vigilancia en la frontera para prevenir la entrada de otros animales no controlados, en especial en una zona donde se sabe que la rabia no ha sido erradicada por completo.

Además, se recuerda a la población la importancia de mantener al día las vacunaciones de sus mascotas, especialmente en una ciudad fronteriza como Melilla, donde existe un riesgo más alto de contacto con animales vagabundos o potencialmente infectados.

En años anteriores, tanto Ceuta como Melilla han vivido episodios similares, lo que ha llevado a reforzar los protocolos de actuación ante casos sospechosos y a mejorar la coordinación con las autoridades marroquíes para la vigilancia conjunta en la franja fronteriza.

¿Qué hacer en caso de sospecha de contacto?

Desde el área sanitaria se indica que, en caso de haber estado en contacto con un animal sospechoso de tener rabia, es fundamental acudir de inmediato a un centro de salud. Allí se realizará una evaluación y, si se considera necesario, se iniciará el tratamiento profiláctico. También se recomienda proporcionar toda la información posible sobre el lugar y la hora del posible contacto para facilitar la investigación epidemiológica.